Núremberg: Qué ver en 2 días

Con la llegada del buen tiempo y los días más largos, aprovechamos para visitar otros lugares en Alemania. Esta vez, nos fuimos hasta Núremberg en una escapada de fin de semana. Sinceramente, creo que es el tiempo ideal que dedicarle a la ciudad.

El primer día, recorrimos el centro de la ciudad y aprovechamos para hacer un free tour. El segundo día visitamos el Centro de Documentación Nazi a primera hora y después fuimos al declarado pueblo más bonito de Alemania: Rothenburg ob der Tauber.

En este post os voy a mostrar el recorrido que seguimos nosotros para dos días, pero si vas a pasar más tiempo en la ciudad, también hablaré de otros atractivos de la ciudad que merecen una visita.

Cómo llegar

En avión: Si viajas desde España, Ryanair ofrece vuelos baratos desde varias ciudades costeras de España como Girona o Mallorca. Una vez allí, basta con tomar la línea U2 (roja) del metro y en menos de 15 minutos estarás en la estación central. El precio es de 3,10€ y es válido durante 90 minutos, por si tienes que hacer trasbordos.

Pero si quieres viajar desde Madrid o Barcelona, entonces te recomiendo que lo hagas al aeropuerto de Múnich con muchas mas combinaciones y que se encuentra a tan solo 1 hora y media de la ciudad. Puedes alquilar un coche, tomar un tren o la opción más económica (y más lenta) un flixbus.

En coche: Si estas realizando una ruta por Alemania esta es la mejor opción. Las distancias no son muy grandes entre ciudades, y además, la mayoría de autovías al no tener limite de velocidad te permiten ir algo más rápido de lo habitual. Tres carreteras principales cruzan Nuremberg: la A3, A6 y A9. Desde Frankfurt hay 225 kilometros.

Dónde alojarse

Lo bueno que tiene esta ciudad es que la mayoría de cosas que hay que visitar se encuentran en el centro de la ciudad, por lo que se puede recorrer andando. Así que mi consejo es que os decantéis por algún alojamiento céntrico y os ahorrareis dinero en el transporte público.

En Booking encontrareis muchas opciones de alojamiento. Yo no recomiendo en el que me alojé, porque a pesar de estar en el centro, el sitio no estaba limpio y las camas eran muy malas. El nombre era “Apartmens Center Nürnberg”. Aunque fue muy económico (menos de 15€ por persona y noche).

El B&B Hotel es una buena opción, ya que se encuentra a menos de 10 minutos del centro andando y no tiene precios muy elevados.

Qué ver en Núremberg

Día 1: Recorremos el centro histórico.

Nos levantamos temprano para realizar un tour histórico que nos llevó a conocer la importancia de Nuremberg para el denominado “Tercer Reich” . Después, por nuestra cuenta visitamos el castillo y alguna zona que nos habían recomendado durante el tour.

El castillo de Núremberg

Es uno de los lugares más espectaculares de la ciudad y que cuenta con las mejores vistas.

Para llegar hasta allí tendrás que subir por una pequeña cuesta, donde lo primero que verás es el Kaiserstallung (los establos), un bonito edificio que hoy en día ha sido transformado en un hostal. Desde allí, a través de una gran puerta accederás a las callejuelas del castillo.

El castillo es uno de los palacios imperiales medievales más importantes que albergó entre 1059 y 1571 a todos los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico. Para visitarlo hay que comprar un ticket (combinado o por zonas).

La Torre Sinwell se construyó a fines del siglo XIII. En el interior hay una escalera de caracol de madera que conduce a una plataforma de observación y durante el camino se pueden ver fotografías de como quedó la ciudad tras la Segunda Guerra Mundial. El precio es de 3,50€ y también se incluye la visita al pozo profundo, que se realiza con un guía. Es increíblemente profundo con casi 50 metros excavados y atraviesa múltiples capas de roca.

La doble capilla fue construida alrededor del año 1200 y destaca por tener un una galería exclusiva para el emperador, que le permitía mantenerse alejado de la corte. Junto a ella el salón imperial, que quedó totalmente destruido durante la Segunda Guerra Mundial y fue reconstruido posteriormente. En su interior alberga una exposición sobre el funcionamiento del Imperio. La entrada para estas dos estancias es de 5,50€.

El precio de la entrada combinada es de 7€ ( 6€ reducida).

Mi consejo, es que si no tienes mucho tiempo, obvies entrar en las estancias y disfrutes de un paseo por sus calles y las vistas desde el mirador. También puedes acercarte a los jardines que son totalmente gratuitos. 

Iglesia de San Lorenzo

Otro edificio, que se ve desde casi cualquier punto de la ciudad, es la Iglesia de San Lorenzo con sus dos imponentes torres de casi 80 metros de alto. Se encuentra en pleno casco antiguo. Vale la pena visitar la iglesia gótica para ver los altares medievales, el impresionante rosetón de 9 metros y el órgano, con sus 12.000 tubos, que lo convierte en uno de los más grandes del mundo.

Hauptmarkt

La plaza principal de Núremberg es enorme y hace honor a su nombre. Allí se celebran mercadillos todas las semanas con distintos productos de la región. Nosotros probamos un Rostbratwurst, que es la salchicha típica de la ciudad.

En este lugar hay dos monumentos de visita obligada en Núremberg. La Iglesia de Nuestra Señora, donde a las 12pm cada día se reúnen decenas de personas para ver el espectáculo del reloj, y la llamada “Fuente Hermosa” donde dicen que si giras su anillo dorado tres veces se cumple el deseo que pidas.

Los puentes de Núremberg

Núremberg tiene numerosos puentes repartidos por la ciudad, por eso te voy a hablar los que debes cruzar al menos una vez durante tu visita a la ciudad.

El puente del museo es el más famoso, y seguro que lo reconoces nada más cruzarlo. Allí se sitúa el hospital Espíritu Santo fundado en el siglo XIV. Fue la dotación privada más grande del Sacro Imperio Romano Germánico. Hoy en día es un restaurante y una residencia de ancianos.

El puente de los carniceros (Felischbrücke) por donde pasaba el emperador cada día, debe su nombre a una carnecería muy famosa que se situaba allí. Aunque originalmente fue construido en madera, tras un grave incendio a mediados de 1400, fue reconstruido en piedra y sobrevivió incluso a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.

El puente del verdugo, sin duda mi favorito. Esta construido en madera, totalmente cubierto y peatonal. Sirvió de pasarela para conectar la ciudad con la isla de Trödelmarkt. Muy cerca se encuentra el Puente Suspendido de hierro, que ofrece unas maravillosas vistas del río con el puente del verdugo al fondo.

Patio de los artesanos

Otro lugar histórico del casco antiguo es el Handwerkerhof (Patio de los Artesanos). Al adentrarte en sus calles parece que te trasladases a otro siglo puesto que conserva un ambiente medieval extraordinario. Es un buen sitio para descansar y tomarse una cerveza en alguna de sus terrazas. Aún hoy, sigue lleno de tiendas artesanas donde adquirir un bonito recuerdo.

Casa de Alberto Durero

Alberto Durero fue uno de los artistas más famosos de Alemania, y su casa se ha convertido en un pequeño museo. Nosotros no llegamos a visitarlo por falta de tiempo, pero si merece la pena pasear por su exterior. Está ubicado justo en la base del castillo, y la casa de madera se remonta al año 1500, época en la que vivió el pintor.

El precio de la entrada es de 6€ (1,5€ reducida).

Además, se encuentra al final del Callejón de los Curtidores (Weißgerbergasse) una de las zonas más fotografiadas de Núremberg. Sus casas tradicionales de madera le dan un encanto inigualable.

Día 2: Alrededores y Rothenburg ob der Tauber

Centro de documentación y campo Zeppelin

Nuestra idea inicial era dar una vuelta rápida por la zona, pero al final pasamos allí toda la mañana.

En este complejo de 11 km2 de extensión fue donde el Partido Nazi orquestó su campaña de propaganda. El centro de documentación se encuentra en el ala norte del Kongresshalle, diseñado por los nazis para acoger a 50.000 personas y que nunca llegó a terminarse.

El Campo Zeppelin es sin duda el lugar más impactante. Se puede subir hasta el balcón donde Hitler presidía las concentraciones de propaganda Nazi.

Rothenburg ob der Tauber

Al mediodía nos dirigimos a este pequeño pueblo considerado como uno de los más bonitos de Alemania, y por supuesto, no nos defraudó. Mi recomendación es que te dejes llevar por las diferentes calles que se encuentran dentro de la muralla para disfrutar al máximo de sus coloridas casas y su ambiente medieval.

Algunos lugares que hay que visitar son su imponentes torres, murallas y puertas y la pequeña plaza triangular Plönlein, uno de los sitios más fotografiados de Alemania.

Mención especial quiero hacer al restaurante donde comimos. Aunque esta vez no era alemán, si no un italiano regentado por italianos. El trato fue exquisito, la comida espectacular y los precios muy económicos. ¡Volvería sin pensarlo! El nombre es Trattoria Pane e Vino.

Otro lugares que visitar en Núremberg

Como solo pasamos un día completo en la ciudad, hay lugares que me quedé con muchas ganas de visitar. Así que si tienes tiempo, te dejo algunos que me parecen muy interesantes. ¡Yo los disfrutaré a la próxima!

Cuevas subterráneas de Núremberg

Se construyeron hace más de 600 años para almacenar y mantener fría la cerveza y, con la llegada de la Segunda Guerra Mundial, fueron usados como refugio. Es un laberinto de túneles subterráneos que solo se puede visitar con guía. Existe un tour disponible con audioguía en español.

Precio: 9,90€ (reducida 8,25€)

Memorial de los Juicios de Núremberg – La Sala 600 

Esta es una visita obligada para cualquiera que esté un poco interesado en la historia (a mi me dio mucha rabia no visitarlo). El lugar donde se llevaron a cabo los juicios de Núremberg y los líderes nazis fueron llevados ante la justicia. Todavía es usado como sala de audiencias.

Durante el recorrido por el Memorial se puede visitar la famosa sala 600 donde se celebró el famoso juicio y una completa exposición permanente sobre el proceso. Se incluye una audioguía en español. El mejor momento para visitarla es los sábados cuando el tribunal no está en sesión.

Museo del juguete 

Si viajas con niños, es una opción muy interesante.  Puedes ver aquí juguetes tradicionales de madera, coches, trenes, LEGO y juguetes de hojalata de Lehmann entre otros. Además cuenta con una sala para que los más pequeños puedan divertirse probando algunos de los juguetes.

El precio es de 6€ ( reducida 1,5€)

Dónde comer

Como estuvimos poco tiempo, tratamos de probar la comida local más popular. Tras el free tour preguntamos a nuestro guía que sitios nos recomendaba y nos decantamos por Bratwursthaeusle una casita-restaurante situada en el centro de la ciudad que parece más pequeña de lo que es realmente. Allí probamos los platos más típicos de la zona.

Schaufele: Un codillo hecho al estilo de la ciudad, acompañado con una ensalada de patatas.

Nürnberger Rostbratwürste: Son las salchichas típicas de la ciudad, y sin duda, una de las que más me gustaron durante toda mi estancia por tierras alemanas. Están hechas al grill.

Rotbier: Como no podía ser de otra forma, acompañamos la comida con una cerveza roja artesanal de Nuremberg.

Todo esto sin olvidarnos de pedir unos pretzel y de postre su tarta de manzana por excelencia: El Apfelstrudel

Núremberg en navidad

El Mercado de Navidad en Nuremberg se llama Christkindlesmarkt y se sitúa en la famosa plaza Hauptmarkt. Es uno de los más espectaculares de Alemania, así que si tienes la oportunidad de viajar en esas fechas, no me lo pensaría.

Y si tienes dudas por el frío que hace en diciembre en Alemania, ¡no te preocupes!, Siempre puedes entrar en calor viendo alguno de los conciertos de villancicos que se celebran en las Iglesias o probar el vino caliente en alguno de sus mercadillos.

También se celebra la procesión con luces, en dirección al castillo de Nuremberg que merece la pena ver.